Omar, el gato “más grande del mundo” según los Récord Guinness
Cuando Stephy Hirst, una joven de Melbourne (Australia), y su marido llegaron a la tienda de mascotas para comprarse un gato, no imaginaron que estaban a punto de adquirir el ejemplar más grande del mundo. Tampoco pensaban que su historia iba a ser un increíble fenómeno viral y que medios de todo el planeta hablarían del pequeño felino.
Era diminuto, lindo, adorable y decidieron llamarlo Omar. Pero rápidamente ese pequeño animalito empezó a crecer y crecer y… crecer. Pasado un año de su nacimiento, allá por septiembre de 2013, el gato pesaba ya 10 kilos. Sin embargo su desarrollo no estaba ni siquiera cerca de terminar.
De raza Maine Coon, a medida que su cuerpo se hacía más grande, se acercaba al tamaño de Ludo, también de aquella raza, que mide 118,3 centímetros y hasta hace poco ostentaba el título de gato más grande del mundo.
“Omar era diminuto cuando lo compramos, pero empezó a crecer y pesaba ya 10 kilos con 1 año”, contó su dueña todavía sorprendida por la impresionante evolución del animal, cuando su mascota comenzó a tener relevancia en las redes sociales.
La vida de la familia y del felino cambió para siempre cuando la foto de Omar apareció en la cuenta de Instagram ”Cats Of Instagram”. Su tamaño sorprendió a todos y se volvió famoso. Al poco tiempo los representantes del Record Guinness se contactaron con ella para decirle que su gato podría ser el más largo del mundo. “Al principio no sabía si lo decían en serio”, dijo Hirst que confesó que habían imaginado que el tamaño de su mascota no era normal: “Sí que pensamos que podría ser el gato más largo del mundo, pero no hicimos nada al respecto porque no estábamos seguros de que había terminado de crecer aún”.
Entonces llegó la medición oficial que definió que el gato mide 120 centímetros y pesa 14 kilogramos: efectivamente el más grande de todos. Omar se transformó en una celebridad que todos deseaban conocer. “Todos nuestros amigos quieren venir a ver a nuestro gato. Dicen que está hecho con Photoshop o que no puede ser real y entonces se sorprenden cuando lo conocen en persona”, contó Hirst.
Aunque tantas visitas no le gustaron al gato que, según contó su dueña se mostró un poco afectado por tanto movimiento, visitas y extraños queriendo conocerlo.
Un tiempo después de aquella coronación, en 2017, Omar recuperó la tranquilidad. “Duerme en el sofá, porque ocupa demasiado espacio en la cama y exige mimos durante toda la noche”, señaló Hirst. Su rutina diaria incluye despertarse a las 5 de la mañana, comer, echarse una siesta en el jardín y disfrutar de su plato favorito para la cena: carne de canguro cruda.
Debido a su singular tamaño, la dieta de Omar es especial. Además de su extravagante cena, el gato incluye un desayuno especial con croquetas hechas específicamente para los gatos de su raza. Aunque se levanta a las cinco de la mañana, vive una vida bastante relajada y disfruta en la casa de su dueña junto a sus perros, Rafiki y Penny.