Abatido a tiros el oso Scarface
El animal más famoso del parque nacional de Yellowstone, situado en los Estados de Wyoming, Montana e Idaho (Estados Unidos), ha muerto a manos de unos furtivos a los que ahora se trata de dar caza. Era un oso grizzly de nombre Scarface, cicatriz en inglés, en alusión a su cara marcada, y era un anciano de 25 años. Al ser una especie en peligro de extinción, el oso grizzly está protegido y matar a uno de estos animales es ilegal salvo en defensa propia. Las sanciones van desde multas hasta prisión, en caso de que se llegue a identificar al autor.
Todos los años, cientos de aficionados a los osos esperaban su aparición con la llegada de la primavera en el parque del celebérrimo oso Yogui de la serie de dibujos animados, pero este año no se le ha visto y se pensaba que le había llegado su hora de forma natural. El majestuoso ejemplar, que llegó a pesar más de 270 kilos, había perdido casi la mitad de su peso el año pasado y menos del 5% de los osos macho nacidos en Yellowstone llegan a vivir más allá de los 25 años.
Sin embargo, ahora se ha sabido que el animal, clasificado como el oso 211, no había muerto de viejo, sino que lo han matado a tiros. Lo ha certificado la Agencia de Pesca, Vida Salvaje y Parques de Montana, que ha informado en un comunicado de que Scarface fue abatido con un arma de fuego el pasado otoño. Murió a fines de noviembre de 2015 al norte de Gardiner.
El Servicio de Pesca y Vida Salvaje de EE.UU. (FWS, por sus siglas en inglés), organismo federal que vela por los animales silvestres y hábitats naturales, investiga el caso. De momento, se desconoce la identidad del cazador.
El grizzly es una subespecie del oso pardo que puede llegar a alcanzar los 270 kilos y que es bastante habitual en la geografía de los Estados Unidos y Canadá. En 1975 solo había 136 ejemplares en libertad, pero hoy superan los 700 gracias a la protección federal y estatal. Según informa BBC Mundo, en el Gran Ecosistema de Yellowstone murieron el año pasado 61 osos de este tipo, de las que solo tres están catalogadas como muertes naturales.
Al menos 37 fueron causadas por humanos, ya fuera al intentar alejarlos de hogares, en accidentes de carretera o en defensa propia. Pero también se registran ataques de osos a humanos. En 2011, un excursionista murió a manos de un grizzly. Era el primer caso en 25 años. El campista estaba haciendo trekking junto a su esposa cuando se toparon con una osa y sus crías. Uno de los momentos de mayor riesgo de sufrir un ataque se da cuando la madre va acompañada de sus crías, dada la protección que les brinda.