Ámsterdam trabaja en serio contra el cambio climático
Son nuestras actividades cotidianas y diarias como lo son la movilidad, el transporte de los productos de consumo y de alimento, la calefacción, la explotación o transporte de combustibles fósiles, etc. Es todo esto lo que contribuye a las emisiones de CO2 que acelera el cambio climático. Según los datos de la ONU, la contaminación urbana de las ciudades contribuye a casi 3,4 millones de muertes prematuras en todo el mundo. Esto se debe a que la contaminación ambiental aumenta la probabilidad de sufrir enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
Es por todo lo anteriormente nombrado por lo que Ámsterdam ha comenzado a implantar medidas que están encaminadas hacia una mayor sostenibilidad urbana. Una de sus grandes aspiraciones en temas de contaminación y cambio climático es que tiene como objetivo, para el año 2050, ser una ciudad totalmente libre de emisiones de CO2.
Entre las medidas que está llevando a cabo para alcanzar esta sostenibilidad se encuentra:
El programa “Aire Limpio 2025” tiene como objetivo una movilidad sostenible que elimine las emisiones de CO2 vinculadas al transporte, tanto público como en especial el privado. También se prevé una sustitución progresiva de los autobuses de motor diésel por modelos de cero emisiones y aumentar la cantidad de vehículos eléctricos. También se fomentará un apoyo a la sustitución particular de los vehículos eléctricos con planes de apoyo a particulares y restricciones para los vehículos de gasolina y diésel. Los vehículos más contaminantes verán su acceso restringido a diversas zonas de manera progresiva tal y como lo está haciendo Madrid con el plan de Manuela Carmena.
Se promoverá la energía limpia y sostenible con una transición desde el uso del carbón y el gas natural hacia el uso de las renovables. Así, en 2050 se pretende haber eliminado en toda la ciudad el uso de gas natural para convertirla en zona libre de emisiones de CO2. En los próximos cuatro años se espera que unos 100.000 hogares puedan incorporarse a una nueva red alimentada con energía limpia, que será obtenida mediante la quema de basuras, el uso de la energía restante de la industria, la geotermia, el gas verde (aquel que liberan sustancias orgánicas como el estiércol o restos de plantas), o el uso de paneles solares.
Planes de concienciación y educación ambiental. Esto es de vital importancia de cara a mejorar la calidad del aire urbano. Se ha desarrollado un proyecto llamado TreeWifi en el que se intenta motivar a los vecinos a mantener el aire limpio de las calles a cambio de internet gratis. TreeWifi está colocando casas para pájaros en los árboles de la ciudad con un sensor para medir la calidad del aire y un router WiFi con conexión a Internet. Así, mientras los niveles de contaminación y de calidad general del aire se mantengan dentro de los límites recomendados, el tejado de la casa para pájaros se iluminará en verde y los vecinos dispondrán de WiFi gratis. En caso contrario, el tejado de la casa se iluminará en rojo y el router cortará la conexión a Internet.