Bolsas de plástico, una amenaza para el medio ambiente

Según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), entre un 70 y 90% de los residuos acuáticos que se encuentran en las playas son plásticos. Solo en 2008 se produjeron casi tres toneladas y media de bolsas de plástico en toda Europa y cada año circulan 800.000 toneladas de estas bolsas en la Unión Europea (UE).
¿Por qué es nocivo el residuo plástico?
Las bolsas de plástico dañan o incluso pueden matar a los animales marinos. Muchas especies marinas no saben distinguir entre los residuos y sus presas habituales: las tortugas, por ejemplo, pueden ingerir bolsas de plástico al confundirlas con medusas. Asimismo la acumulación de contaminantes en el fondo marino empobrece los suelos al bloquear el intercambio de agua y sedimentos. Numerosos animales pueden enredarse en los diferentes tipos de residuos plásticos. Algunos morirán por las heridas, otros tendrán dificultades para moverse y se convertirán en presas fáciles para sus depredadores.
Debido a la acción de las olas, de las corrientes, del sol, las bolsas de plástico se fragmentan en trocitos minúsculos denominados microplásticos, por lo que resulta imposible retirar estos residuos del medio marino. En algunos lugares del mundo, podemos encontrarnos seis veces más cantidad de plástico que de plancton marino, que es la base de la cadena trófica.
Además, cuando el plástico se descompone, puede liberar sustancias tóxicas que se introducen en su composición, como los ftalatos, los bifenilos o el bisfenol A, que alteran el sistema endocrino. A largo plazo, los microplásticos pueden volver a la cadena trófica, acabando en nuestra mesa a través de pescados, crustáceos, etc. pudiendo entrañar consecuencias nefastas para nuestra salud.

Fuente: SABINA HOURCADE - SURFRIDER FOUNDATION EUROPE

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *