Cómo hacer tu oficina ecológica
Recicla
La gran mayoría de la basura en las tiendas y oficinas es reciclable: el papel, periódico, cartón y plástico todos se pueden reciclar. Para que funcione un programa de reciclaje, tiene que ser fácil de hacer y entender. Los botes de basura y reciclaje deben de ser claramente marcados y bien ubicados. Si puedes conseguir el apoyo de tu jefe y/o compañeros de trabajo, mucho mejor: tal vez puedan organizar los detalles en una junta o en el comedor. Si la oficina o tienda es grande (o si se juntan varias oficinas o tiendas chicas) tal vez sea posible vender los materiales reciclables.
Sé digital
En los Estados Unidos se utilizan 300 kilos (más de 600 libras) de papel por persona, por año. A la vez, el mundo está digitalizándose cada vez más. De hecho, actualmente es más fácil perder un papel que un archivo digital: el archivo se respalda en línea (en el servidor), en el disco duro y en otro disco duro externo. Entonces, piénsalo dos veces antes de imprimir: ¿realmente necesitas esa impresión? Hacer las cosas conscientemente puede salvar millones de árboles vivos que están produciendo el oxígeno que necesitamos para respirar.
Usa tu propia taza
¿Tomas agua o café en el trabajo? Trae tu propia taza. Los vasitos desechables casi siempre se hacen de materiales no reciclables y no biodegradables, y se consumen muchísimos cada día. Imagina que todos esos vasitos se amontonaran en tu oficina en vez de tirarse: ¡qué rápido se llenaría el espacio! Ahora multiplica eso por todas las oficinas, gimnasios, tiendas y consultorios en el mundo… Qué cantidad de basura la que se puede evitar con este simple acto de traer tu propia taza… La solución eres tú.
Apágalo y desenchúfalo
El uso eficiente de los aparatos eléctricos puede ahorrar bastante energía (y además disminuir los gastos de la compañía): tan sólo el uso ineficiente de las computadoras en las oficinas desperdicia hasta un millón de dólares al año. Primero, programa las computadoras, impresoras y otros electrónicos para que se suspendan (hibernen) después de 15 minutos de inactividad (o el tiempo que sea conveniente). Cuando se va a cerrar la oficina, apaga y desenchufa las computadoras, impresoras, etc., ya que todos los aparatos eléctricos siguen gastando energía mientras estén enchufados, especialmente los que tienen un foquito siempre prendido. Para hacerlo más fácil y conveniente, utiliza multicontactos para poder desenchufar varios aparatos a la vez.
Aclimátate
¿Qué caso tiene estarse congelando y con suéter en tiempo de calor, para luego andar en ropa súper ligera en tiempo de frío? Modifica el control del clima para que esté más cercano a la temperatura de afuera; pues si vas a usar suéter, úsalo cuando hace frío afuera, no cuando hace calor. Tus clientes también te lo agradecerán: el cambio de temperatura que experimenta el cuerpo cuando pasa de muy frío a muy caliente o vice versa hace el organismo más susceptible a gripa, resfriado e inclusive neumonía en personas mayores.
¡Abre la ventana!
Muchos materiales de construcción y todos los aparatos electrónicos despiden gases tóxicos (¡inclusive radioactivos!) que son dañinos para la salud. ¿Tu y tus compañeros de trabajo se enferman cada rato, o experimentan cansancio y dolor de cabeza? Podría ser por la contaminación del aire causado por los materiales del edificio y los electrónicos. Cuando sea posible, abre las ventanas para que se cambie el aire. Si no hay ventanas o no se pueden abrir por alguna razón, habla con el gerente acerca de mejorar el sistema de ventilación.
Modernízate
Mantenterte al día con los avances tecnológicos tiene sus beneficios. Los electrónicos nuevos suelen ser mucho más eficientes y económicos que los viejos. Busca equipos con la certificación ecológica (como Energy Star) y moderniza tu oficina. Si todavía están utilizando focos incandescentes (los focos viejos), cámbialos por focos fluorescentes o LED. Un foco incandescente que gasta 75 watts se puede reemplazar con un foco fluorescente que gasta 13 watts, o con un foco LED que gasta tan sólo 3 watts. Los tres dan la misma cantidad de luz, pero es mucha la diferencia que verás en tu factura de electricidad.