Diez alimentos para humanos que jamás debes darle de comer a tu perro
Generalmente son chuches o dulces que a primera vista parecen inocuos, aunque si la entrega del amo para con su mascota es absoluta, descubrimos que los animales reciben por su cumpleaños incluso tartas de chocolate. A veces es el propio animal el que observa suplicante a su amo, esperando recibir un trocito pequeño de ese delicioso manjar que está llevándose a la boca para degustar en soledad. Entonces, cualquiera que no tenga un corazón de piedra decide repartir un poco con su mejor amigo del mundo animal, pensando que no tiene por qué pasar nada. Es un error, por supuesto. La revista ‘Mel Magazine’ ha elaborado una lista que quizá te parezca obvia, pero aunque no lo creas no lo es tanto.
Alcohol
Nunca. Ni perros ni gatos. Si bien los animales generalmente responden al alcohol de manera similar a los humanos, su experiencia menos consciente de la embriaguez y su tamaño generalmente más pequeño los hace mucho más propensos a sus consecuencias negativas. Además, muchos alcoholes contienen ingredientes que pueden ser especialmente dañinos para los animales. El lúpulo, por ejemplo, es tóxico para los perros, así como algunos edulcorantes artificiales que tienen algunos cócteles.
Aguacate
Te preguntarás, ¿quién le da de comer aguacate a su perro? Pues si está en la lista es porque a alguien se le ha ocurrido en alguna ocasión. Por si eres tú ese alguien, contienen una toxima llamada persina, que puede causar importantes problemas de salud e incluso la muerte en las mascotas si se consumen en grandes cantidades. Una pequeña cucharada puede estar bien, pero generalmente no vale la pena correr el peligro.
Chocolate
Es un alimento que muchas personas dan a su mascota, como premio, pensando que es inocuo. En realidad puede causar todo tipo de problemas, como hiperactividad, convulsiones e incluso la muerte pues contiene (especialmente el negro, y junto con el café) unas sutancias llamadas mentilxantinas, por lo que lo mejor es que lo evites.
Uvas
Si bien las sustancias tóxicas en las uvas aún se desconocen en gran medida, pueden causar insuficiencia renal en animales.
Nueces
Las de macadamia son especialmente perjudiciales para perros y gatos, pues pueden provocar depresión, debilidad, temblores e hipertemia, así como un grupo de afecciones intrínsecamente relacionadas con el calor. Los altos niveles de aceite y grasa en los frutos secos en general también producen vómitos, diarrea o incluso pancreatitis. Eso sí, si tienes un pájaro no te preocupes lo más mínimo.
Cebolletas
Las cebollas, el ajo y el cebollino pueden causar problemas gastrointestinales y posiblemente incluso anemia, especialmente en los gatos. Aunque si es en pequeñas cantidades no tendría por qué pasar nada, pero, ¿para qué arriesgarse?
Cítricos
Comer una sola naranja solo debería causar un leve dolor de estómago en tu perro, pero demasiados cítricos pueden ser más peligrosos.
Carne cruda y huevos
La carne cruda y los huevos pueden contener bacterias peligrosas como la salmonela y la E. coli. Los huevos crudos en particular tienen una enzima llamada avidina que puede causar problemas en la piel y el pelo de las mascotas. Mucha gente piensa que el chocolate es inofensivo, pero en realidad puede causar todo tipo de problemas, como hiperactividad, convulsiones e incluso la muerte Además, los huesos, que tienen reputación de manjar apto para perros, en realidad son súper peligrosos: representan un gran riesgo de asfixia y pueden causar daño intestinal si se astillan.
Patatas o alimentos con mucha sal
Un poco de sal no matará a tu mascota, está claro, pero mucha puede causar micción, sed excesiva e incluso intoxicación. Eso puede resultar en vómitos, diarrea, depresión, temblores, temperatura corporal elevada, convulsiones e incluso la muerte.
Ositos de goma
Son muy monos y parecen una chuche inofensiva que puedes darle a tu mascota si se ha portado bien, ¿no? Sin embargo, la intoxicación por xilitol en perros y otros animales puede provocar la liberación de insulina, lo que puede, a su vez, producir insuficiencia hepática causada por hipoglucemia o niveles bajos de azúcar. Averigua si ese alimento que le vas a dar a tu mascota lo tiene, antes de hacerlo.