El mal aliento en perros y gatos
“Si se descubre que la causa es una acumulación excesiva de sarro y una gingivitis (inflamación e infección de las encías), se debe realizar una limpieza dental para solucionarlo. Posterior a esto, se debe mantener un adecuado procedimiento.
El cepillado se recomienda dos veces por semana (con pasta especial para mascotas, o sin ella, pero nunca con la pasta de uso humano) y una buena alimentación, es decir con alimento especial”, explicó Lisa Fonseca Salazar del centro veterinario Dr. Jimmy.
Indicó que ese tipo de producto suele ser seco y de mayor tamaño o con una forma especial, lo que favorece la fricción del diente con el alimento y con ello la limpieza al ser masticado.
“También se pueden emplear productos que ayuden a prevenir la formación del sarro (gel dental, enjuagues especiales para mascotas), pero hay que acostumbrarlos desde pequeños”, agregó.
Fonseca dijo que en el caso de los gatos, el mal aliento lo produce el consumo de ratones o insectos, ya que les quedan restos en el área de las muelas o en la garganta. A ellos se suman las bolas de pelo.
“Es importante que, si se descartan las dos primeras opciones y la condición persiste, no se pase por alto esto, ya que podrían ser alteraciones metabólicas más serias.
Como por ejemplo diabetes, problemas renales, digestivos u otros y por ende, se necesitarían exámenes complementarios para confirmar el diagnóstico e instaurar un tratamiento”, aconsejó.