La mortalidad aumentará en un 4% por cada grado que aumente la temperatura global

Una investigación en la que participaron 27 instituciones de todo el mundo concluyó que respecto al año 2000, el año pasado hubo 57 millones de personas más expuestas a olas de calor.
La mortalidad por los efectos del cambio climático se incrementa en un 4% por cada grado que aumenta la temperatura ambiente, según una nueva investigación llevada a cabo por profesionales médicos y académicos de 27 organizaciones participantes, entre las que se encuentran la Organización Mundial de la Salud (OMS), el University College London Institute o el Banco Mundial.
Se trata del documento ‘Lancet Countdown Report 2018’ el cual analiza, a nivel mundial, la evolución del cambio climático y la eficacia de las medidas adoptadas hasta ahora para evitar sus consecuencias negativas, al tiempo que incluye una serie de recomendaciones dirigidas a la Comisión Europea para poner freno a esta situación.
Tal y como se concluye en el informe, el año pasado hubo 57 millones más de personas vulnerables sometidas a una ola de calor respecto al año 2000, y 18 millones más que en 2016. Asimismo, se calcula que en 2017 se perdieron 153 mil millones de horas de trabajo debido al calor extremo como resultado del cambio climático.
Las temperaturas del planeta han subido de media 0,3 grados centígrados entre 1986 y el 2017, si bien pero el incremento en las zonas habitadas es más del doble (0,8°C). Ante esto, el documento adaptado a España elaborado por la SEMI y ‘Lancet Countdown’ incluye una serie de recomendaciones para situar al cambio climático y sus efectos como un problema importante de salud de cara a la opinión pública y la Administración en España.
“El impacto extremo del cambio climático en el ámbito de la salud amenaza con saturar los servicios sanitarios en todo el mundo. Ello se debe a que la exposición y la vulnerabilidad al calor extremo están afectando de manera importante a la población, especialmente a las personas de mayor edad y a aquellos pacientes con enfermedades subyacentes, como enfermedades cardiovasculares, diabetes o enfermedades crónicas. Por ello, debemos poner especial interés en las medidas de prevención para que esto no suceda”, ha dicho el presidente de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), Ricardo Gómez Huelgas.
Por otra parte, según el informe ‘Lancet Countdown Report 2018’, la contaminación del aire con partículas finas es particularmente problemática para la salud, provocando un total de 2,9 millones de muertes a nivel mundial en 2015.
Según se advierte en el trabajo, si no se llevan a cabo las medidas necesarias las consecuencias serán todavía peores. De hecho, el aumento de la mortalidad a causa de olas de calor extremas es algo que ya está sucediendo en la actualidad y que irá a peor a medida que las temperaturas globales sigan aumentando y si no se llevan a cabo las medidas adecuadas.
Finalmente, el trabajo ha analizado la exposición al calor de la población en relación a cuatro indicadores clave: vulnerabilidad al cambio climático, efectos de las temperaturas en la salud, las olas de calor, y los efectos en la capacidad laboral.
Así, las enfermedades relacionadas con el calor continúan aumentando a nivel mundial como resultado del aumento de la temperatura promedio y los cambios en las precipitaciones, especialmente la propagación de enfermedades infecciosas como el dengue.
Pero los efectos climáticos adversos no solo afectan de forma directa a la salud, sino que también impactan en la malnutrición y la falta de medios en los países más vulnerables.

Fuente: Agencia Europa Press - Ciencia Plus

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *