Los Recursos Renovables
Estos recursos, como pueden ser el aire, el agua, los minerales o la luz, resultan esenciales para la vida en el planeta Tierra, esto es tanto para los animales, como para las plantas y los seres humanos.
Dentro de estos recursos se puede establecer una clasificación, de acuerdo a su durabilidad. Es por ello que se habla de los siguientes tipos:
Recursos no renovables
También conocidos bajo el nombre de “agotables”, estos recursos son los que, por sus cualidades, no pueden regenerarse o, si lo hacen, esto ocurre a una velocidad y en una proporción muy por debajo de lo que se requiere para poder darle provecho. Esto ocurre por ejemplo con el petróleo, que le lleva años regenerase.
Es por ello que cada vez más se promueve su uso sustentable, se los reemplaza por otros recursos y se concientiza sobre este tema, puesto que las generaciones futuras podrían verse en peligro si no se toman medidas al respecto. Otros ejemplos de recursos no renovables podrían ser la nafta, el gas natural o incluso el carbón.
Recursos renovables
En oposición a la clasificación anterior, estos recursos sí se renuevan de manera natural y a una velocidad mucho más significativa que los no renovables. De esta manera, ni la generación actual ni las futuras corren el riesgo de carecer de ellos en algún momento.
De todas maneras, esto no significa que los recursos renovables se utilicen indiscriminadamente. Por ejemplo, con el caso de la madera, si bien es cierto que pueden plantarse o crecer nuevos árboles que reemplacen a los talados, si la tala se produce a velocidades muy extremas, sí podrían haber faltantes, y se puede dañar ciertos ecosistemas. Es por ello que aún en estos casos debe existir la planificación.
Ejemplos de recursos renovables
Algunos ejemplos de recursos naturales renovables podrían ser los siguientes:
El sol: el sol es uno de los recursos energéticos más importantes y de hecho es el más inagotable de los que existe en nuestro planeta. Es por ello que cada vez se promueve más el uso de la energía solar.
El agua: otro recurso natural que resulta indispensable para la vida de todos los seres vivos que habitan el planeta Tierra es el agua. Y además, se trata de una fuente energética, gracias a los movimientos de las masas de agua. Es muy importante su cuidado puesto que los procesos para purificarla resultan costosos. Si bien es renovable, es limitado. Más información aquí.
El viento: otro recurso natural que es inagotable e indispensable como fuente de energía, que se capta a través de molinos, es el viento.
El papel: a partir de la madera o incluso reciclándolo, el papel es otro recurso que se renueva fácilmente, por lo que nunca podría escasear.
El cuero: otro bien que es muy utilizado por las personas y que resulta inagotable, por lo que sigue siendo una opción para producir prendas de vestir y otros productos, es el cuero.
Los biocombustibles: estos productos que permiten generar energía se producen a partir de los alcoholes que derivan de la caña de azúcar o de distintas semillas y plantas. En los últimos años se han convertido en la alternativa del diesel, que sí es agotable.
La madera: a partir de la tala de árboles se puede obtener madera para la producción de distintos bienes, como pueden ser los muebles. Ahora bien, como se mencionó antes, es esencial que la tala no sea compulsiva, porque podría superar el tiempo que lleva la regeneración de este producto y así, se corre el riesgo de que escasee este bien tan útil y fundamental.
Las mareas: estos cambios en el nivel del mar como consecuencia de la fuerza de atracción gravitatoria también resultan inagotables. Este recurso es utilizado en muchas comunidades para generar energía.
La energía geotérmica: otro recurso que resulta inagotable es esta fuente de energía, que se produce a partir de las elevadas temperaturas que se generan en el interior del planeta Tierra. La magnitud de esta energía es equivalente a la solar, de allí su importancia.
Productos agrícolas: todos aquellos productos que se obtienen a partir de actividades agrarias, como puede ser el maíz, la soja, el tomate o la naranja, parecieran ser inagotables, siempre y cuando se tomen precauciones para no agotar los suelos.