Los perros también pueden sufrir depresión

Al igual que los humanos, los perros también pueden sufrir de depresión y por muchos motivos, como los cambios de rutina, los cuales pueden estar vinculados a una mudanza, a la pérdida de un ser querido, entre otros.
Esta depresión se manifiesta en varios aspectos, como los cambios en su comportamiento y en su lenguaje corporal que es importante que el dueño sepa reconocer para ir en busca de ayuda médica.
Los cambios de comportamiento indican que un perro podría estar deprimido, cambios tales como el aislamiento o pérdida de energía del animal, incluso la posición de la cola podría ser un síntoma de depresión.
Esto debido a que los perros felices tienen una gran energía y son de ir jugando y corriendo por todos lados. Por ello, un cambio en el comportamiento, pasando de esta alegría a una falta de entusiasmo y aislamiento, podría ser un indicador de una depresión.
Otro factor a considerar es el patrón del sueño, ya que si bien los perros duermen bastante, el hecho que este horario aumente aún cuando está el dueño es indicador que algo no está bien. Asimismo, la falta de apetito y el rechazo a la comida que le encanta también debe ser una señal de alerta.
Si el animal comienza a gruñir, romper o actuar de forma agresiva cuando se intenta interactuar con él, podría considerarse un síntoma depresivo.
Si encuentra estos síntomas en tu mascota, lo mejor que se debe hacer, es ir al veterinario para que este identifique la razón de los cambios del animal, ya que parte de estos síntomas también podrían significar una enfermedad diferente que solo el especialista conocerá.