Por qué las áreas protegidas son claves para afrontar el cambio climático
Éstas pueden amortiguar los impactos de los eventos climáticos extremos y garantizar la prestación de servicios ecosistémicos fundamentales para el bienestar humano, como agua potable, y alimentos. En la Amazonía hay más de 390 áreas protegidas que cubren cerca del 25 % del todo el bioma amazónico.
Estas cinco razones le permitirán entender por qué éstas áreas son tan importantes:
1. Ayudan a que la biodiversidad se adapte
Las Áreas Protegidas pueden contribuir a la adaptación de la biodiversidad al cambio climático, manteniendo o aumentando la salud de los ecosistemas, su integridad y la conexión entre ellos.
2. Regulan el clima y son productoras de agua
La provisión de agua potable, la regulación climática, la conservación de la biodiversidad y la polinización, son solo algunos de los servicios ecosistémicos que prestan las Áreas Protegidas y que pueden facilitar la adaptación de las personas al cambio climático. Éstas áreas producen buena parte del agua potable que se consume en un tercio de las 105 ciudades más grandes del mundo.
3. Reducen el impacto de eventos climáticos extremos
Pueden ayudar a reducir el impacto de eventos climáticos extremos, protegiendo a las comunidades de fenómenos como las inundaciones, sequías, incendios, deslizamientos y otros desastres naturales.
4. Almacenan Carbono
Almacenan carbono de la atmósfera en los ecosistemas naturales y pueden ayudar a prevenir la liberación del mismo. La creación de nuevas Áreas Protegidas, y la ampliación y mejoramiento de las existentes, representa una gran oportunidad para aumentar las reservas de carbono. Actualmente, las Áreas Protegidas almacenan al menos un 15% del carbono terrestre mundial, que al liberarse se convierte en dióxido de carbono, responsable en buena parte del calentamiento global.
5. Ayudan a reducir la pobreza
Funcionan como estrategias de adaptación y mitigación generando beneficios para las comunidades que las rodean, con incidencia en la reducción de la pobreza.